¿Cuándo podremos ver al nuevo heredero? Esa es la pregunta que hoy se hacen los británicos. Previsiblemente, los duques de Cambridge presentarán hoy a su hijo en público en el mismo lugar en el que la princesa Diana y el Príncipe Carlos posaron con el príncipe Guillermo hace 31 años. En principio se esperaba que Catalina de Middleton abandonara la maternidad de St. Mary a lo largo del día y con el Príncipe de Cambridge en brazos, ante las cámaras expectantes de cientos de periodistas y una multitud creciente que a estas horas desborda los alrededores de la estación londinense de Paddington. Sin embargo, otras fuentes apuntan a que no será hoy cuando abandone el centro al ser demasiado pronto. En cualquier caso, no habrá aparición pública antes de las 19.00, hora española.
"No podríamos estar más felices", fueron las escuetas palabras del príncipe Guillermo a las pocas horas del nacimiento de su hijo, que pesó 3,8 kilos y llegó al cabo de casi once horas de parto natural. El anuncio del nacimiento se produjo cuatro horas después para dar a la pareja más tiempo para disfrutar del momento en la intimidad. Los duques de Cambridge pasaron la noche en el hospital como medida precautoria, aunque Catalina recibirá el alta a lo largo del día.
El Palacio de Kensington no ha revelado cuál será su destino inmediato, aunque todo parece indicar que la pareja y el recién nacido se alojarán provisionalmente en la mansión de los Middleton en Bucklebury, mientras duran las obras de acondicionamiento del apartamento que ocuparán a partir de octubre en el palacio tradicionalmente asociado con la princesa Diana.
Se espera, eso sí, que la Reina pueda ver antes a su nieto, aunque de momento no ha anunciado ninguna parada oficial en el palacio de Buckingham, donde miles de británicos festejaron el nacimiento del futuro Rey hasta altas horas de la madrugada. El caballete donde se exhibe el acta de nacimiento del Príncipe de Cambridge se ha convertido en la principal atracción turística de Londres, rivalizando con el propio hospital de St. Mary.
La Casa Real no ha revelado aún cuál será el nombre del niño, aunque los británicos han hecho ya sus apuestas por dos clásicos, Jorge y Jaime, con Carlos como posible segundo nombre, en honor al abuelo.
El príncipe Carlos, que se encontraba por cierto de visita oficial en York cuando se produjo el ingreso en el hospital de Catalina de Middleton, regresó sin excesivas prisas a Londres e hizo público: "Me siento lleno de júbilo por la llegada de mi primer nieto. Es un momento increíblemente especial para Guillermo y Catalina. Y también lo es para mí (…) Me siento como un abuelo tremendamente orgulloso y feliz. Tanto yo como la Duquesa de Cornualles estamos esperando ver al niño lo antes posible".
Al príncipe Enrique le sorprendió la noticia con su escuadrón de helicópteros de la RAF en Wattisham y llegó a confesar que se sentía "muy excitado" ante la posibilidad de ser tío. Antes de partir ayudó incluso a su hermano y a su cuñada a empaquetar la bolsa con primeras necesidades para el parto, incluidas la chocolatinas favoritas de Catalina y sus canciones favoritas en un iPod.
El primer ministro David Cameron se apuntó a la algarabía nacional con un mensaje sobre la marcha en twitter: "Estoy encantado ahora que por fin ha nacido el hijo del Duque y la Duquesa. El país entero lo celebrará. Serán unos padres maravillosos".
Hasta el primer ministro escocés, Alex Salmond, se apuntó a la fiebre monáquica... "Estoy seguro de que la gente en Escocia está estusiasmada por el nacimiento del niño de la pareja real y querrán unirse a mí en el momento de enviar mis felicitaciones a los orgullosos padres".
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