(CNN Español) - Para atender en forma más efectiva a las víctimas de las intensas lluvias que ha azotado el sudeste de Brasil, la presidenta Dilma Rousseff estableció nuevas normas para reducir la burocracia y beneficiar de forma mas rápida a los damnificados de las zonas afectadas por desastres naturales.
Hasta ahora el temporal ha dejado decenas de muertos y cerca de 50.000 desplazados en los estados de Espíritu Santo y Minas Gerais tras las extensas inundaciones causadas por la crecida de los ríos.Según la prensa local, la Fuerza Aérea ha rescatado a más de 160 personas en los últimos tres días.
El Ministerio de Salud ha dicho que enviará más toneladas de medicamentos e insumos, así como vehículos y equipos para el transporte de emergencia.
El número de víctimas mortales en se elevó a 45 y el de las personas obligadas a dejar sus viviendas por las inundaciones a 65.533, según un boletín de la Defensa Civil regional. En Espíritu Santo hay 27 muertos.
En Minas Gerais, el número de víctimas ascendió a 18 tras el hallazgo del cuerpo de un niño de 7 años que estaba desaparecido desde hacía una semana tras un deslizamiento de tierras en Sardoá, municipio en el este del estado.
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