El sábado una caravana atravesó Caracas para protestar contra las detenciones de opositores. El viernes por la noche los incidentes de saldaron con más de 40 detenidos, según anunció en su twitter la jefa de prensa de Presidencia, Teresa Maniglia. Además, la presidenta de Argentina calificó el sábado lo que está ocurriendo en Venezuela de un “intento de golpe (de Estado) suave”.
El inicio de una semana de vacaciones previas al aniversario, el 5 de marzo, de la muerte del ex presidente Hugo Chávez no ha hecho que se retiraran completamente las manifestantes de las calles, tal y como esperaba el gobierno venezolano. El presidente Nicolás Maduro anunció esta semana que añadía el jueves y el viernes al largo fin de semana que ya incluía lunes y martes como festivos. Un gesto gubernamental interpretado como un intento por calmar las tensiones.
Más bien al contrario, las protestas siguen produciéndose a lo largo de todo el país. Este sábado 1 de marzo, estatuas de líderes y personajes ilustres aparecieron con pancartas y pintadas en favor de la libertad, según informaron medios venezolanos, y un grupo contrario al gobierno colocó cruces en señal de luto en la playa Lido Anzoátegui, en recuerdo de los estudiantes muertos.
Además, la oposición organizó este sábado en Caracas una caravana de automóviles para protestar contra "la tortura y la represión" y exigió que se liberen a presos políticos y estudiantes detenidos durante más de dos semanas de protestas.
La noche del viernes volvió a estar marcada por los disturbios y se saldó con 40 detenciones, en Altamira, en Chacao, al este de Caracas, entre ellas las de ocho extranjeros "solicitados por el terrorismo internacional", según la jefa de prensa del gobierno. Uno de ellos es la periodista italiana Francesa Commissari que estaba cubriendo una manifestación y permanece prisionera en el Fuerte Tiuna.
Francesa trabaja para el periódico local “El Nacional”.
Las autoridades venezolanas arrestaron en las últimas horas a 41 personas en el este de Caracas por participar en guarimbas (barricadas) entre las que hay ocho extranjeros que están buscados por "terrorismo internacional".
Un golpe suave
Cristina Fernández, la máxima dirigente argentina, aprovechó su discurso de apertura del año legislativo en Argentina, para cargar contra las protestas de la oposición en Venezuela. “No puedo dejar de referirme a un tema vital para la región: el intento de golpe suave contra la República Bolivariana de Venezuela. No vengo a defender al presidente Nicolás Maduro, vengo a defender al sistema democrático de un país, como hemos hecho en Bolivia, en Ecuador y lo haremos en cualquier país de la región, aunque sean de izquierda, de derecha, del medio o del fondo”, señaló.
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