martes, 3 de junio de 2014

LA DESIGUALDAD SOCIAL ES EL EJE DE LA ASAMBLEA ANUAL DE LA OEA



La Organización de Estados Americanos (OEA) dedica su asamblea anual de cancilleres a la desigualdad. Los actos preparativos comenzaron este lunes en Paraguay y parten de la tesis de que el crecimiento económico por sí mismo no resuelve este problema.

“Aún prevalece un alto grado de injusticia en la distribución de la riqueza y en el acceso a los bienes sociales, una desigualdad que es de un tamaño tal que incluso daña nuestro tejido democrático”, apuntó el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza.

Es en ese contexto en el que tendrá lugar el debate entre los 28 cancilleres y altos cargos de otros seis países americanos (todos menos Cuba) que han confirmado su presencia a la Asamblea de la OEA, la cual inicia oficialmente hoy. El lema es “Desarrollo con inclusión social”.

Los actos previos al cónclave comenzaron hoy con una conferencia sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales organizada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), un órgano autónomo de la OEA.

El evento es parte de una serie de contactos con organizaciones no gubernamentales del continente para definir la metodología y misión de la futura Relatoría Especial sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales.

El objetivo será que la CIDH no se ocupe solo de recibir peticiones sobre casos de violaciones de derechos humanos, sino de promover estos derechos, en áreas como la salud, el trabajo, la seguridad social y la alimentación, según el comisionado encargado del tema, el brasileño Paulo Vannuchi.

Reforma al SIDH

Paralelamente a este asunto, la reforma al Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH) siempre está en debate. Insulza rechazó cambiar la sede de la CIDH, ubicada en Washington.

En un encuentro con organizaciones no gubernamentales, el funcionario dijo que las propuestas de reforma de ese órgano de la OEA requieren cambios a los tratados que rigen su actuación.

“El proceso de reforma solo podría culminar exitosamente para quienes lo proponen con una reforma sustantiva a la Convención de Derechos Humanos y la Carta de la OEA”, dijo el chileno. “Eso es un camino inconducente, porque todos sabemos que no va a ocurrir”, añadió.

Explicó que la secretaría de la CIDH “es la secretaría general de la OEA”, por lo que cambiar su sede implicaría trasladar la sede de la propia organización.

“La pregunta es qué sentido tiene eso y sobre todo si un debate interminable sobre esto fortalece o debilita a la Comisión de Derechos Humanos”, dijo.

Los participantes en la IV Conferencia de Estados Parte del Pacto de San José, que tuvo lugar en Haití el pasado martes, propusieron sacar a la CIDH de Washington y Haití se ofreció para acogerla.

La reforma de la CIDH es impulsada por Ecuador y cuenta con el apoyo de otros países de la región.

Quito promueve la salida de la CIDH de Washington porque Estados Unidos no ha firmado la Convención Americana de Derechos Humanos, también llamada Pacto de San José.

Eso le exime de la jurisdicción de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, pero no de la CIDH, que ha criticado a EE.UU. por la aplicación de la pena de muerte y la detención indefinida de sospechosos de terrorismo en Guantánamo, por ejemplo.

“¿Qué es esta historia de que la Comisión no puede funcionar si no en un Estado miembro? El país donde está es un Estado miembro”, dijo Insulza. La Corte tiene su sede en Costa Rica, que sí ha ratificado la Convención.

El secretario general dijo que “no vale la pena” discutir mucho el tema en la Asamblea en Paraguay porque se van a repetir los mismos argumentos que en el pasado. “Seguir con estas cosas yo creo que no va a llevar a ninguna parte”, dijo.

“Soy profundamente partidario de la plena autonomía del Sistema Interamericano de los Derechos Humanos, de la Comisión y su Corte y creo que efectivamente se vulnera la imagen el órgano central de la OEA, donde ha tenido sus mayores éxitos a lo largo de su historia”, manifestó.

La agenda de la Asamblea también contempla temas que van desde la soberanía de las Islas Malvinas, el cambio climático y la lucha contra las drogas hasta los derechos de los pueblos indígenas.

La “Declaración de Asunción”, que fija compromisos para mejorar la inclusión social, será firmada por todos los cancilleres presentes, adelantó el viceministro paraguayo de Relaciones Exteriores, Federico González.

Datos

28 cancilleres confirmaron su asistencia, lo que convertirá a esta reunión en la Asamblea General de mayor nivel desde la celebrada en Honduras en 2009.

La desigualdad social es un tema que está en la agenda de los organismos multilaterales y centros académicos.

“Capital en el Siglo XXI”, del francés Thomas Piketty, se ha convertido en la comidilla de los economistas y fue el libro de no ficción más vendido durante tres semanas en EE.UU., según el diario The New York Times. El libro aborda la desigualdad en los países desarrollados, que atribuye a la dinámica natural del capitalismo, ya que los rendimientos inmobiliarios y de acciones, en posesión de los ricos, son mayores que el crecimiento económico del país.

No hay comentarios:

Publicar un comentario