El 1 de octubre, Día Mundial de las Personas Adultos Mayores, se celebró en Ecuador con presentaciones artísticas, marchas y juegos, especialmente en Pichincha, Guayas, Azuay y Tungurahua. Este año estuvo ausente una campaña masiva sobre derechos, inclusión, respeto, participación, respeto y buen trato.
En los medios de comunicación, el Día Nacional (29 de septiembre) y Mundial tuvieron poca difusión. Mientras esto sucedía en Ecuador, el Fondo de Población de Naciones Unidas para el Desarrollo (Unfpa) y HelpAge International publicaron el Índice Global de Envejecimiento 2014, que mide el bienestar de la población de más edad en 4 áreas: seguridad salarial, salud, capacidades personales y ambiente social favorable.
El Índice clasifica a 96 países, representando al 91% (9 de cada 10) de las personas mayores de 60 del mundo.
Igual, destaca las políticas de apoyo para las personas en su vejez, como pensiones, educación, oportunidades laborales, acceso a cuidados de salud gratuitos o transporte subsidiado. Este año se puso especial atención a las pensiones y cómo estas pueden contribuir a que la gente permanezca activa y sea autosuficiente más tiempo.
Noruega ocupó el primer lugar con una calificación de 93,4 sobre 100, que lo convierte en el mejor país del mundo para envejecer. En 2013, este lugar fue ocupado por Suecia que ahora quedó en segundo puesto. A continuación se ubicaron Suiza, Canadá, Alemania, Países Bajos, Islandia, Estados Unidos, Japón y Nueva Zelandia.
El país menos apropiado para las personas mayores es Afganistán que se ubicó en el último lugar. Mozambique (95), Cisjordania y Gaza (94) y Malawi (93) son otros lugares que no garantizan una adecuada calidad de vida en la vejez.
El envejecimiento poblacional es un hecho probado. Ecuador celebró el día mundial con juegos y marchas. Foto: Roberto Chávez / El Telégrafo.
El informe señala que en muchos países la esperanza de vida a los 60 años aumentó, al menos un tercio más con respecto a la expectativa de mediados del siglo pasado.
Las experiencias de la vejez varían de persona a persona, dependiendo en gran medida de donde viven y de las circunstancias de sus vidas antes de llegar a ser viejos.
En países de ingresos medios y bajos, una de cada 4 personas de 65 años y más vive sin el beneficio de una pensión. Esto determina que la urgencia de proporcionar protección social básica a los adultos mayores es en esencia reconocer el derecho a una vejez digna, así como la necesidad de contar con independencia financiera.
En países con altos ingresos económicos se demuestra que el crecimiento económico por sí solo no mejorará el bienestar de las personas mayores y que debe haber políticas específicas para tratar las repercusiones del envejecimiento.
En el mundo, según el informe, hay un total de 868 millones de personas mayores de 60 años, cerca del 12% de la población global. Hasta 2050 está previsto que se incremente 21%.
El envejecimiento de la población es una realidad en todas las regiones. Las personas que llegan a los 60 años pueden esperar vivir 16 más. La proporción de personas mayores de 80 años también crece rápidamente. Se estima un aumento del 2% actual, al 4% de la población mundial hasta 2050.
Si el envejecimiento de la población parece un hecho probado, la pregunta que queda por resolver es la calidad de vida que tendrán las personas adultos mayores.
El informe 2014 señala que 150 millones de personas mayores de 65 años viven sin una pensión. Por ejemplo, el 29% de los indígenas mayores recibe una ayuda de este tipo, el 4% de mayores de Malawi y nadie en Myanmar.
Sin embargo, el 95% de los bolivianos mayores obtiene una pensión social que no solo lo ayuda de forma individual, pero también se le atribuye la reducción de la pobreza de los hogares un 13,5%. El 74% de los chinos mayores tiene ahora una pensión que llega a 130 millones de personas.
El Índice muestra que la cobertura de las pensiones aumenta, sobre todo en América Latina, pero la adecuación sigue siendo un problema importante. Por ejemplo, en Kirguistán la pensión es de $ 98 al mes, 6 por debajo del nivel de subsistencia ubicado en 104.
La situación se ve agravada por la baja actividad económica entre las personas mayores, por ejemplo en Asia Central en comparación con otras regiones.
Otro dato interesante del Índice es la medición de las capacidades de las personas a través de la actividad económica y nivel educativo. Cerca del 22% de las personas de más de 80 años buscan un trabajo en Indonesia; el 92% de las personas de 55-64 años en Tanzania. Muchas personas en Colombia de 60 años y más necesitan seguir trabajando, pero la discriminación por edad lo impide. Anuncios de empleo especifican rutinariamente más solicitantes de jóvenes.
Los informes de los distintos países muestran que la responsabilidad provincial de los servicios significa que estos son a menudo diferentes en las zonas rurales y urbanas, en función de los proveedores del gobierno local. Por ejemplo, los servicios de salud suplementarios en Canadá, el acceso a los centros de día en Colombia y los servicios de ambulancias en Kirguistán, varían mucho entre las diferentes partes del país.
La realidad que viven los adultos mayores en el mundo tiene efectos colaterales. Por ejemplo, el desgaste del cuidador y la demanda de atención individual y servicios de la comunidad para que las personas puedan permanecer en sus hogares en sus años posteriores son cuestiones de interés para la sociedad civil, los gobiernos y los profesionales del mundo.
Este año, el lema del Día Internacional de los Adultos Mayores es ‘No dejar a nadie atrás: promoción de una sociedad para todos’. Está claro que es necesario prestar mayor atención a las necesidades particulares de las personas de edad y a los problemas que se enfrentan muchas de ellas. Es igualmente importante la contribución esencial que la mayoría de los hombres y las mujeres de edad pueden seguir aportando a la sociedad.
Datos
Las proyecciones a futuro muestran que para 2050, 40 países del Índice mundial tendrán más del 30% de su población mayor de 60 años.
Colombia está por debajo de la proyección, con un 23%. Igual Ecuador con 22,1.
Los países que más rápido envejecen en la región son Chile y Costa Rica, con 31 y 30%, respectivamente.
Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en la región, la esperanza de vida al nacer subió 24 años: de 51 años en 1950 a 75 años en 2010.
En 1990, las personas adultos mayores representaban el 7,3% del total. En 2010, el 9,8%.
En 2030 representarán el 16,7%.
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