Son hijos de Prince Boateng, un exfutbolista ghanés que no tuvo suerte en el profesionalismo y se trasladó a Alemania donde tuvo a sus dos hijos varones que crecieron separados, pero unidos por un balón.
Kevin Prince, de 26 años, vivió una serie de escándalos por indisciplina en las categorías inferiores en Alemania, por lo que eligió a la africana Ghana como su selección de origen.
Jacome, un año menor y jugador del Bayern Munich, debutó en Alemania y enfrentó a su hermano por primera vez en un partido mundialista. Los alemanes vencieron 1-0 a los africanos en Sudáfrica 2010.
Ambos mantuvieron una relación cordial hasta que Kevin Prince, actual jugador del Schalke 04, lesionó al inglés Michael Ballack en la final de la Copa FA, lo que ocasionó que el astro se perdiera el mundial sudafricano. Su hermano, Jacome, señaló que su expulsión fue merecida. Este comentario rompió su relación.
El sorteo del Mundial Brasil 2014 los volverá a unir cuando en la primera fase se enfrente la selección de Alemania y Ghana el 21 de junio en Fortaleza.
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