Como parte del proceso de cambio de las cocinas a gas por las de inducción, está también la transformación de las redes eléctricas de 110 a 220 voltios, que es el voltaje que requieren los electrodomésticos y que hasta julio de 2016 deberán estar instalados en todo el país.
El titular del Ministerio de Industrias y Productividad (Mipro), Ramiro González, dijo que el costo de la sustitución de redes para el Estado será de $ 320 millones, dentro de los cuales está incluido el cambio de transformadores, a fin de que no exista ningún contratiempo en la utilización de las nuevas cocinas.
González indicó que el medidor y la instalación de la línea hasta la casa serán asumidos por el Estado. Mientras que la conexión interna, la que va del medidor hacia dentro de la vivienda, le costará al usuario.
El funcionario recordó que en este momento hay hogares que cuentan con los sistemas de electricidad a 220 voltios y espera que en lo que va de este año y el transcurso de 2015, estén las redes instaladas a ese voltaje en todo el país.
DATOS
El presidente de la República, Rafael Correa, el 22 de marzo de este año informó que el consumo de 80 kW de electricidad para cocinar y el de 20 kW/hora por ducha eléctrica será gratis hasta 2018. Después de ese año, los 100 kW/hora costarán $ 4, lo mismo que el gas subsidiado.
La ciudadanía podrá adquirir una cocina eléctrica con facilidades y un financiamiento de hasta 3 años plazo. El pago se realizará a través de la planilla de energía.
Ecuador es uno de los países de América del Sur que más subsidia combustibles, uno de los principales productos es el GLP.Con el objetivo de ahorrar aproximadamente $ 800 millones en subsidio al gas, el Ejecutivo ofreció el 22 de marzo de este año importantes incentivos para reemplazar el uso del gas licuado de petróleo (GLP) por el de energía eléctrica eficiente hasta 2016. La aplicación del plan de los incentivos iniciará en agosto de este año.
Se espera que el proyecto de cocción eficiente sustituya 3 millones de cocinas a gas por eléctricas de inducción con juegos de ollas.
En dos años estarían listos los nuevos proyectos hidroeléctricos (Coca Codo Sinclair, Sopladora, Minas San Francisco, Toachi-Pilatón, Delsitanisagua, Manduriacu, Quijos y Mazar Dudas), los cuales garantizarán que este recurso sea suficiente para aplicarlo en cocinas eléctricas y eliminar el uso del GLP en los hogares.
El 92% de los hogares ecuatorianos utiliza GLP para la cocción de alimentos, lo que significó que el Gobierno gastara $ 710’949.570 en 2012 como subsidio.
Proceso de cambio de voltaje
El delegado del Ministerio de Electricidad, Carlos Dávila, aseguró que el proceso de cambio de voltaje de 110 a 220 voltios que requiere el nuevo electrodoméstico se cumple paulatinamente a nivel nacional. Al momento ya cuentan con este voltaje un millón de hogares, de los cuales 800.000 están divididos entre Quito, Guayaquil y Cuenca, mientras que 200.000 están repartidos en el resto del país.
Alberto Tama Franco, exgerente de la Eléctrica de Guayaquil, explicó que en general, en el caso de Guayaquil, las redes de distribución eléctrica, específicamente las secundarias, permiten obtener un servicio a 120/240 voltios. “Las acometidas que ingresan a las viviendas son por lo general conductores triplex (2 fases y un neutro), ingresan al tablero de medidores y se distribuyen a cada uno de los módulos de medición. Estos, a su vez, alimentan cada tablero de distribución en cada departamento o vivienda”, dijo.
Paneles de las cocinas
El Ministro de Industrias también dejó en claro que lo que se va a entregar son los paneles de las cocinas y que los artefactos que al momento se tienen en casa pueden ser reutilizados solo cambiándoles la parte superior. “Las cocinas viejas se las debe mantener, ya que lo que se les entregará serán los paneles que van encima”, sostuvo el funcionario.
Así mismo, informó que el costo de los electrodomésticos oscilará entre $ 150 y $ 250, pero solo la plancha superior. Sin embargo, para alguien que quiera adquirir una cocina con horno el costo sería de $480, que es el precio base que hasta el momento se ha presentado.
En cuanto a los aspectos técnicos que deben tener las cocinas, mencionó que un artefacto de cuatro zonas (quemadores) deberá tener de potencia entre 3.000 y 3.200 vatios, que es suficiente para que la cocción se cumpla sin dificultad.
Desde agosto próximo los ciudadanos podrán voluntariamente inscribirse mediante la página web que se va a crear, para que adquieran las cocinas. Recordó que dentro del plan se tiene previsto dar un subsidio a los 100 kilovatios, cobertura que se inicia inmediatamente después de que se adquiera el artefacto, incluso antes de que entren a funcionar las hidroeléctricas. “Los empresarios tienen una red de distribución de cocinas en el país y vamos a tener incluso un convenio con las empresas eléctricas para que entreguen los artefactos”, aseveró González, quien recalcó que la ayuda que otorgará el Estado es solo para las cocinas nacionales y no para las importadas.
Sector empresarial
Para el sector empresarial, si bien existen dudas, se irán despejando en el transcurso de los días. Miembros del sector dijeron estar listos para fabricar el producto y que sea distribuido a nivel nacional. “Trabas para la fabricación no hay, simplemente son definiciones de costos de aranceles, si va a haber crédito o no, ver cómo funciona el mecanismo de crédito para los usuarios, tarifas eléctricas”, enfatizó el gerente general de Enerinteco, Juan Manuel Flores.
De su parte, el representante de Ecasa, Mario Esteban Espinosa, dijo que se ha reducido el tiempo para la entrega de las cocinas; sin embargo, hay la predisposición para cumplir con los requerimientos.
Nuevas conexiones
Alberto Tama, exgerente de la Eléctrica de Guayaquil, explicó que el cambio en las instalaciones de energía eléctrica en los hogares dependerá de si cuando se construyeron las viviendas se dejaron previstos tomacorrientes para 240 voltios. Si no hubiese, tendría que colocarse un punto (conexión) exclusivo para ese tipo de sistema.
Un artefacto de cuatro zonas (quemadores) deberá tener de potencia entre 3.000 y 3.200 vatios.
800.000 casas de Quito, Guayaquil y Cuenca ya tienen conexiones eléctricas a 220 voltios.Explicó que, en general, la potencia que tiene cada una de las hornillas de la cocina de inducción es entre 1.5 y 2 kilovatios, lo que quiere decir que posiblemente -dependiendo del número de hornillas que se utilice- se deberá cambiar la capacidad del breaker y los cables de alimentación. “Todo depende de cuánta carga tenga conectada, no se puede decir a simple vista que todas las casas deben hacer este cambio. Hay que hacer un estudio serio para cada tipo de construcción. Posiblemente en las casas que se encuentren en el centro haya la necesidad de cambiarles el breaker principal y también el medidor. Todo será en función de su carga instalada”, precisó.
Tama explicó que todo depende de a qué hora se prenda la cocina de inducción. “Todas las cocinas van a ser prendidas, por ejemplo entre las 11 y 12 de la mañana, entonces va a aumentar la carga pico. Todos esos detalles los tienen que prever las empresas prestatarias de este servicio. Existirá una alta demanda tanto de potencia como de energía en las horas pico, tanto por la mañana como en la noche. Y en horas del desayuno también, todo dependerá de qué alimento se prepare”, acotó.
Con respecto a si los demás electrodomésticos que hay en los hogares deberán también acoplarse al mismo voltaje que las cocinas de inducción, Tama aclaró que las instalaciones eléctricas están compuestas por circuitos de alumbrado, de tomacorrientes y especiales, “donde en cada circuito de tomacorrientes hay conectadas, en promedio, entre 6 y 10 salidas”.
“Todo depende de cómo lo hizo el proyectista, el técnico que construyó su casa. Por ejemplo: la lavadora (120V), secadora (220V), refrigeradora (120V), microondas (120V), tienen tomacorrientes de uso exclusivo. Asimismo, se va a tener un tomacorriente dedicado para las cocinas de inducción a 220 voltios”, subrayó.
Viviendas informales
Alberto Tama es escéptico con el tiempo en que se haga el cambio en los sectores marginales del país, ya que la mayoría de las conexiones eléctricas en estos lugares son informales, sin un adecuado proceso.
“No creo que el cambio tecnológico sea rápido en los sectores marginales, posiblemente lo dejen para el último. Tendrán que invertir mucho dinero y más aún, es muy peligroso -de no tomarse las medidas de seguridad que correspondan- porque se pueden quemar las viviendas al producirse un cortocircuito. Porque la gente no lo va hacer de forma independiente; será la Empresa Eléctrica, con las normas técnicas y de seguridad que correspondan, para que no haya ningún tipo de accidentes”, agregó.
El experto cree que el Gobierno empezará con los barrios que se encuentran formalizados, adecuados y aptos para recibir este tipo de servicios. Mientras que en los otros sectores se trabajará poco a poco y de manera planificada.
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