Si Madrid es la casa de Diego Simeone, Atlético es el living, donde se siente cómodo y arma equipos a imagen y semejanza. En esta ocasión, el equipo de a orillas del Río Manzanares volvió a festejar: se quedó con la Supercopa de España al derrotar 1-0 a Real Madrid, como local -en la ida, en el Santiago Bernabéu, habían igualado en 1- . Por si a alguien esto le suena a poco, el Atlético del Cholo rompió una hegemonía de seis años en la que el equipo blanco y Barcelona se habían repartido el trofeo que enfrenta al ganador de la Liga con el de la Copa del Rey. Desde la llegada de Simeone al banco colchonero, en 2011, Atleti ya sumó 5 títulos.
Como de costumbre, Atlético de Madrid pegó bien de entrada. Y mucho tuvieron que ver dos de sus flamantes incorporaciones. Al minuto, un pelotazo del arquero Moyá complicó al cenrtral Varane, que no pudo rechazar. Griezmann peinó la pelota, marcado por Sergio Ramos y Mandzukic, con un derechazo cruzado, dejó sin opciones a Casillas y puso el 1-0 para los rojiblancos.
Recién promediando la primera etapa pudo llegar a fondo Real Madrid, cuando tras una buena combinación con el lateral Carvajal, James Rodríguez llegó al fondo por derecha, enganchó para el medio y soltó un zurdazo rasante que hizo obligó al arquero Moyá a lucirse y desviar el remate. Nervioso, Simeone reclamó posición adelantada y, tras palmear la cabeza del cuarto árbitro, fue expulsado.
A los 35, otra vez el colombiano tuvo el empate, con un cabezazo que salió muy cerca del poste izquierdo del arco local, tras un preciso centro de Modric desde la derecha. Ya hacía méritos para empatar el equipo blanco y otra vez le pasó cerca al 1-1 antes de los 40, cuando tras combinar con Rodríguez, un zurdazo cruzado de Bale se fue muy cerca. Antes del final de la primera etapa, Atleti volvió a salvarse, dado que un nuevo zurdazo de James estuvo a poco de transformarse en el empate.
Para el inicio de la segunda etapa, Ancelotti mandó a la cancha a Cristiano Ronaldo en lugar e Toni Kroos. Pese al cambio, Atlético casi liquida el partido antes de los 5 minutos, cuando el zurdazo de Raúl García, tras un centro, dio en el travesaño. Otra vez el volante pudo marcar el segundo, antes de los 15, pero su derechazo cruzado desde el borde del área salió muy cerca del travesaño del arco de Casillas. Real contestó con un potente derechazo de Cristiano, pero el remate le salió a las manos de Moyá. A diferencia de lo que fue la final de la Copa de Campeones pasada que el REAL le ganó sobre el final en Lisboa, Atlético no se metió atrás, casi no sufrió, e, incluso, pudo ganar por más.
Ya sin Diego Costa como figura en el ataque, una vez más se vio la muñeca del entrenador para incorporar un delantero que ya le rinde: el croata Mario Mandzukic. Y como el fútbol no para, desde el lunes, Atlético de Madrid defenderá el título de liga ganado la temporada pasada, cuando visite a Rayo Vallecano.
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