1) Hombre nuevo. Martino dijo que "me gusta el estilo del Barcelona y no lo voy a cambiar". Diplomacia pura desde la convicción aunque la prensa catalana lo mantiene en observación, todavía. El Tata sigue peleando contra el desconocimiento y el prejuicio, sobre todo luego de que dijera que "tengo que darle variantes" al equipo y que el equipo mermara el lucimiento pero no la eficacia.
2) Debut campeón. Después de la gira por el sudeste asiático, los primeros partidos oficiales fueron las finales de la Supercopa ante el Atlético de Madrid, del Cholo Simeone. El Barça empató 1-1 en el Calderón, donde Neymar convirtió su primer gol oficial, y después igualó 0-0 en el Camp Nou. Martino no se colgó medallas y dijo que el primer título del año era de los jugadores y de Tito Vilanova.
3) Los núneros. Con el Tata en el banco, el Barça jugó 11 partidos de Liga con 10 triunfos y un empate (0-0 de visitante con Osasuna). Logró el mejor arranque de la historia del club con 8 triunfos consecutivos, superando la marca de Vilanova del año anterior. En Champions completó la primera ronda con 2 triunfos (1-0 a Celtic en Glasgow y 40 al Ajax en Camp Nou) y un empate (1-1 con Milán en San Siro). Juega el 6 de noviembre con Milán, el 26 con Ajax y el 12 de diciembre con Celtic. Si gana el próximo partido se habrá clasificado a la ronda siguiente.
4) Los goles. En la Liga tiene 3 goles de promedio por partido. Si mantiene la tendencia llegaría 114 al final del torneo, uno menos que el año pasado. Un poco por las ausencias y la eficacia reducida de Messi y un poco por el mejoramiento en el rendimiento de los otros jugadores, ya no depende tanto de Leo para convertir. Hasta 11 jugadores han hecho goles en los dos torneos.
5) La seguridad. En 11 fechas del campeonato el equipo recibió apenas 7 goles contra los 12 del mismo plazo de la temporada pasada. En 16 partidos de Liga y Champions terminó con el arco invicto en 9 encuentros, contra 5 del año pasado.
6) las rotaciones. Cuidar a Messi, todo un tema. Martino dio su primera señal de autoridad en el primer partido de la Liga cuando sacó a Messi faltando 20 minutos y el equipo ya había hecho media docena de goles. El 7-0 inicial al Levante y un juego espectacular, sobre todo en el primer tiempo, pasaron a segundo término. El debate fue la salida de Messi. Martino defendió su decisión y dijo que necesitaban a Leo "y a todos los jugadores" para todo el año. Adempás de Messi, rotaron Iniesta y Xavi, los delanteros Alexis, Pedro, Neymar y Cesc; tuvieron minutos Song, Montoya, Tello y Sergi Roberto. El arquero Valdés es el único que jugó todos los partidos.
7) Los defensores. Piqué, Puyol y el juvenil Bartra son los centrales naturales de que disponía el Tata. Eventualmente Mascherano y Busquets. Pese a que tenía la posibilidad de contratar a otro defensor y a la insistencia de prensa, el Tata dijo "el central está en casa". No contrató a nadie, esperó el regreso de Puyol de su lesión, usó a Mascherano (único error grave en el gol del Milan por la Champions) y le dio chances a Bartra, quien respondió bien. Ganó la discusión, tenía razón Martino.
8) Los delanteros. Desde su llegada se potenció Alexis Sánchez y con el correr de los partidos se fue soltando Neymar. El chileno fue eficaz como titular o cuando le tocó entrar, como cuando marcó el segundo gol ante el Madrid. El brasileño va ganando espacios en el movimiento del equipo, ya no tan escorado a la banda izquierda. También fue decisivo en el clásico.
9) El estilo. Martino le sigue ganando la batalla a la prensa, desde la contundencia de los números. Le critican que el equipo perdió brillo y que lo hace jugar de manera "vulgar". El Tata no entra en fricciones, responde lo justo, no se casa con nadie y decide sin presiones. Lo demolieron cuando el equipo perdió la posesión ante el Rayo Vallecano, un detalle absolutamente menor. Sorprendió al regresar a Messi como puntero en el partido con el Madrid y cuando puso a Song, luego dijo "sí, fue un cambio defensivo y lo volvería a hacer". Esa definición es casi una ofensa para los periodistas catalanes, acostumbrados al brillo de las épocas de Pep y Vilanova. Pero el Tata, inmediatamente, recordó "pero un rato antes había puesto a un delantero por un volante". Es cierto, había puesto a Sánchez. Y Sánchez había puesto el 2-0. El Barcelona, con Martino, no perdió su estilo. En esencia es el mismo, con prestaciones diferentes de sus jugadores y en proceso de incorporar otros conceptos.
10) Ganó el clásico. Suficiente para acallar las voces más críticas. Terminó el primer cuarto de la Liga. Su Barcelona le sacó 6 puntos de ventaja a Real Madrid, que está tercero. Le lleva 4 al Atlético que juega hoy su partido de la fecha 1. También les sacó 11 a Villarreal, 12 al Athletic Bilbao y 15 a Getafe y Levante que están del cuarto a al séptimo puesto y también juegan esta tarde.
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