Alrededor de 2.000 taxistas se paralizaron la mañana de ayer en Portoviejo, como medida de protesta por las tarifas que se estipulan para el uso del taxímetro.
Los transportistas exigen que los valores ($ 0.35 el arranque, $ 0.26 el kilómetro recorrido y $ 0.6 el minuto de espera) suban, ya que según ellos, no les representan mayores ganancias.
Otro de los petitorios del gremio es que la carrera mínima pase de $ 1 a $ 1.50. Los nuevos montos que piden los conductores de los vehículos de alquiler son: $ 0.45 el arranque, $ 0.35 el kilómetro recorrido y $ 0.10 el minuto de espera.
“Nuestra marcha, como puede ver la ciudadanía, es pacífica; es para que nos suban los valores de una manera justa. Esos precios son viejos y no se adaptan a la realidad actual”, indicó un taxista que no quiso ser identificado.
El conductor aseveró que varios taxímetros se han desprogramado. “Todo nos cobran. Los dispositivos son nuevos y se dañan. Nosotros, para seguir trabajando sin problemas, debemos pagar el arreglo del aparato y eso nos perjudica”, dijo.
La paralización empezó a las 09:30 en la vía a Manta.
La cola de carros se extendió por la Terminal Terrestre de Portoviejo, las calles Pedro Guale, Ricaurte, Córdova y Francisco Pacheco, entre otras. Otros choferes llegaron con sus unidades a la Gobernación de Manabí.
Representantes del gremio fueron recibidos al mediodía por la gobernadora, Susana Dueñas.
Piden más seguridad
Otro de los temas por los que se paralizaron los agremiados fue para exigir mayor seguridad.
El pedido se da tras la muerte de un taxista dos semanas atrás en Portoviejo, asesinado por un miembro de la Policía.
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