miércoles, 3 de septiembre de 2014

USUARIOS SE QUEJAN DEL TRANSPORTE


Seguridad, respeto por parte de los choferes, unidades en buen estado, la eliminación de marcada de tarjetas y orden en los paraderos son algunos de los pedidos de los usuarios del servicio de transporte urbano, tras conocer la solicitud de los dirigentes de que se incremente a $ 0,42 el valor del pasaje.
Este diario entrevistó a varios ciudadanos sobre la calidad del servicio que reciben cuando se movilizan en los buses y sus respuestas fueron en ese sentido.

En 5 ciudades del país se registran inconvenientes.

En Riobamba, Liliana Escobar considera que es necesario eliminar los relojes que marcan las horas de llegada y salida de los recorridos de las cooperativas.

Agrega que es el principal problema por el cual los choferes de buses aceleran en determinados momentos los carros y no proporcionan un trato amable al usuario.

“Se desesperan por cumplir con la hora fijada y cuando hay muchas personas en la fila para subir nos empujan, nos gritan para que avancemos de forma rápida, sin importar que hay niños, ancianos, incluso personas con discapacidad”, puntualiza.

En la ciudad funcionan 7 operadoras con 184 unidades de transporte urbano.

Los autobuses son distribuidos en 18 rutas, las cuales llegan hasta a la parada cada 5 minutos en horas que no son congestionadas (09:00 a 11:00) y cada 3 minutos en horas catalogadas como pico (07:00, 12:00 y 18:00).

En la capital tungurahuense hay 3 paradas masivas de buses y decenas más distribuidas en sectores concurridos. Hasta allí llegan cientos de personas a la espera de las unidades.

El principal problema es que carecen de la infraestructura necesaria para que la ciudadanía aborde los vehículos de manera ordenada.
En esta urbe hasta el año pasado estaban registrados 430 nuevos carros, de 5 operadoras, para el servicio urbano.

En Machala, la falta de una terminal terrestre y las pocas paradas de buses complican a los ciudadanos.

En los paraderos del centro de la ciudad y en los que están en los exteriores de la Universidad Técnica de Machala hay cientos de pasajeros y de automotores.

En las horas pico abordar un automotor trae más de un problema a adultos mayores, jóvenes y niños.
En la urbe existen 20 cooperativas de transporte que ofrecen los servicios urbano, intercantonal e interprovincial. En la ciudad se concentra la mayoría, pues aún existen miniterminales pese a que la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) prohibió estas edificaciones.

La competencia de tránsito aún no ha sido asumida por el Municipio. En los próximos días se reunirán el alcalde, Carlos Falquez Aguilar, con la ministra de Transporte y Obras Públicas, Paola Carvajal, para tratar este tema.


En Cuenca, cuyo Cabildo asumió ya la competencia, circulan 475 buses urbanos de 7 operadoras y el servicio se paga con dinero o con las tarjetas Urbania.

Los cuencanos expresan su malestar por los pocos sitios que hay para recargar las tarjetas y porque los choferes no cuentan con monedas para dar el cambio.

En Manta, uno de los mayores problemas es el tiempo que deben esperar los usuarios para abordar un bus.

Érika Saavedra indica que muchas veces se ha visto obligada a coger taxi, ya que el transporte urbano no llegaba y se le hacía tarde para dirigirse a la universidad.

De su parte, Juan Baque, otro de los usuarios, se queja de que los buses no tienen asientos cómodos y que movilizarse en estas unidades es “irritante”.

El dirigente de la Federación de Transportistas Urbanos de Manta (Fetum), Rigoberto Vinces, señala que el gremio busca mejorar la imagen de los carros y la calidad de servicio. “Nosotros nos esforzamos por dar un mejor servicio”, destaca.

El transportista cuenta, además, que sus compañeros han hecho los trámites para el programa de chatarrización que lleva adelante el Gobierno Nacional.

Recuerda que la Refinería del Pacífico hizo un aporte para la seguridad ciudadana y junto con la anterior administración municipal se instalaron, en las unidades, cámaras de vigilancia para dar un mejor servicio a los usuarios.

Manta cuenta con 175 unidades de buses urbanos, los que están afiliados en 4 cooperativas y una compañía, que conforman 17 líneas que recorren la ciudad.

MINITERMINALES SON UTILIZADAS COMO BOLETERÍAS
En Guayaquil las miniterminales, desde donde salían los buses interprovinciales, son utilizadas como boleterías, envío de encomiendas, sitio de mantenimiento y hasta lugar de descanso de los choferes.
El administrador de la miniestación de Transportes Ecuador (ruta Guayaquil-Quito), Víctor Pin, explicó que en la sede de la Av. de las Américas solo quedó para vender boletos y enviar encomiendas. “Los buses salen de la terminal terrestre”.

En la estación de Transporte Esmeraldas, además del envío de encomiendas, hay un espacio para que los choferes duerman. Asimismo, en la Panamericana se expenden los pases.

http://www.telegrafo.com.ec/noticias/informacion-general/item/usuarios-se-quejan-del-transporte-infografia-y-video.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario