Uno de los grandes temas que debe tener un manejo adecuado en las
ciudades y cantones es la gestión de los residuos sólidos. La
Constitución del Ecuador reconoce los derechos de la naturaleza y el
derecho de la ciudadanía a vivir en un ambiente sano. Y según lo
determina el Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y
Descentralización (Cootad), en el literal d del artículo 55, esta
responsabilidad yace en manos de los municipios.
Un mal manejo de estos residuos contamina el suelo, el aire y las fuentes de agua. Esto puede derivar, a su vez, en graves problemas de salud para la población. La situación se agrava en las zonas bajas, como en gran parte del territorio correspondiente a la Zona de Planificación 5 (mapa); debido a las lluvias, estas zonas se inundan y la contaminación se esparce. Sin embargo, un buen manejo de los residuos sólidos puede ser una gran oportunidad, no solo para evitar y resolver las consecuencias, sino también para generar empleo digno y ayudar en la transformación productiva.
La Zona 5 tiene una iniciativa
Es necesario recordar que los grandes problemas requieren grandes soluciones, las mismas que la mayoría de los municipios no están en capacidad de adoptar por sí mismos. Es por esto que 20 municipios de la Zona de Planificación 5 se han unido para adoptar una solución integral y convertir el problema de la basura en una oportunidad para generar empleo digno, transformar la matriz productiva y vivir en un ambiente más sano.
Esta iniciativa ha sido apoyada por el Gobierno Nacional a través del Instituto Nacional de Preinversión, institución adscrita a la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades), que financia los estudios por un monto aproximado a $ 3,5 millones. Con este apoyo financiero y la supervisión técnica del Ministerio del Ambiente, a través del Programa Nacional de Gestión Integral de Residuos Sólidos, las autoridades de los 20 municipios tendrán la información necesaria para gestionar adecuadamente sus residuos. Actualmente, estos 20 cantones generan más de 350 mil toneladas de residuos sólidos al año.
El Plan Nacional para el Buen Vivir 2013-2017 plantea 12 objetivos y la consecución de estos podría verse afectada positivamente si estas 20 autoridades hacen realidad el proyecto y no se queda solo en estudios. Más de un millón de habitantes de los cantones Baba, Babahoyo, Puebloviejo, Palenque, Quinsaloma, Urdaneta, Montalvo, Quevedo, Mocache, Vinces, Valencia, Buena Fe, Ventanas, Caluma, Echeandía, Las Naves, Palestina, Balzar, El Empalme y Jujan podrían mejorar su calidad de vida al aumentar la cobertura en recolección de basura y eliminar los botaderos a cielo abierto. El aumento en la cobertura de recolección, aseo de calles e implementación del o los rellenos sanitarios generaría empleo digno para la población de estos cantones, pero también lo haría en gran medida el aprovechamiento de los residuos.
Aquello, además, aportaría a una transformación en la matriz productiva y energética, puesto que la mayor parte de los residuos de estos cantones es orgánica, tiene un gran potencial de producción de energía y abono. Su aprovechamiento podría también crear nuevas industrias e investigación.
Ventajas de la mancomunidad
Además de estos beneficios que el proyecto puede otorgar a la ciudadanía, no se pueden omitir los inmensos aportes para las administraciones municipales. El hecho de mancomunarse genera lo que suele llamarse economías de escala, esto quiere decir aprovechar mejor los recursos y reducir los costos de manejo. Para poner un ejemplo, imagine que usted tiene que sacar muchas fotocopias, por lo que quiere comprar una fotocopiadora pequeña y contratar una persona para que las saque. Sin embargo, si tiene 20 amigos que necesitan sacar muchas copias y entre los 20 compran una fotocopiadora industrial y contratan a una persona que las saque, el costo de cada copia será menor. Es igual con el manejo de la basura, si cada municipio maneja sus desechos individualmente, invertiría más dinero, ya que debe comprar maquinaria, carros recolectores, etc. En el aprovechamiento de los residuos, la situación es similar debido a que no es viable y mucho menos rentable poner una planta para aprovechar los residuos con muy poca basura, pues igualmente hay que adquirir maquinaria y contratar mano de obra que transforme los residuos en algo útil, por lo que es mucho más beneficioso cuando se junta más materia prima -en este caso residuos sólidos- para transformarla.
Otro beneficio para los municipios es que con el aprovechamiento de los residuos disminuye la cantidad de basura que debe ir al relleno sanitario, lo que reduce los costos del manejo y aumenta su vida útil.
La suma de estos beneficios ha motivado a la unidad de estos 20 gobiernos locales y el Gobierno Nacional. En términos financieros, esta iniciativa sería tan rentable que incluso subsidiaría a otros servicios municipales, como agua potable y alcantarillado. Es lamentable que otros municipios más grandes, que por sí solos generan más basura que estos 20, no hayan adoptado ya un sistema integral de residuos sólidos que incluya su aprovechamiento.
Como todo proyecto gubernamental, la iniciativa necesita del empoderamiento ciudadano. Esto ayudará a su implementación desde su primera etapa y alentará la eliminación de los botaderos a cielo abierto, reducirá la cantidad de basura generada, reutilizando, participando activamente en la separación de la basura, respetando los horarios de recolección, etc.
Actualmente, la primera etapa de los estudios ya ha sido presentada a las autoridades locales. La parte más urgente es el cierre de botaderos y la construcción de celdas emergentes de manejo mancomunado donde disponer la basura temporalmente. La vida útil de estas celdas, que no son otra cosa que rellenos sanitarios temporales, es de 2 años. Con suerte, ese tiempo podría ser suficiente para que las autoridades locales logren, con el apoyo de todos los actores, tener listo el sistema de gestión y aprovechamiento de los residuos de estos 20 cantones.
Datos
El Plan Nacional de Gestión Integral de Residuos Sólidos pretende la eliminación de todos los botaderos del país hasta 2017 y la implementación de 80 rellenos sanitarios.
Actualmente, el 27% de los gobiernos autónomos descentralizados cuenta con procesos de separación en la fuente. En 2013 se reciclaron 987 mil toneladas de residuos sólidos urbanos.
Los estudios para el manejo de residuos que se realizarán en la Zona 5 costarán $ 3,5 millones, aproximadamente, y serán financiados por la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo.
Los cantones que forman parte de la Zona 5 son Baba, Babahoyo, Puebloviejo, Palenque, Buena Fe, Las Naves, Quinsaloma, Urdaneta, Montalvo, Quevedo, Mocache, Vinces, Valencia, Ventanas, Jujan, Caluma.
También se encuentran los cantones Echeandía, Palestina, Balzar y El Empalme. Allí residen más de un millón de personas y en esa zona del país se generan más de 350 mil toneladas de residuos sólidos al año.
La ubicación geográfica de la Zona 5 la hace propensa a inundaciones que dificultan el manejo de residuos sólidos y la limpieza de las ciudades. Eso tiene efectos directos en la salud de los ciudadanos.
Un mal manejo de estos residuos contamina el suelo, el aire y las fuentes de agua. Esto puede derivar, a su vez, en graves problemas de salud para la población. La situación se agrava en las zonas bajas, como en gran parte del territorio correspondiente a la Zona de Planificación 5 (mapa); debido a las lluvias, estas zonas se inundan y la contaminación se esparce. Sin embargo, un buen manejo de los residuos sólidos puede ser una gran oportunidad, no solo para evitar y resolver las consecuencias, sino también para generar empleo digno y ayudar en la transformación productiva.
La Zona 5 tiene una iniciativa
Es necesario recordar que los grandes problemas requieren grandes soluciones, las mismas que la mayoría de los municipios no están en capacidad de adoptar por sí mismos. Es por esto que 20 municipios de la Zona de Planificación 5 se han unido para adoptar una solución integral y convertir el problema de la basura en una oportunidad para generar empleo digno, transformar la matriz productiva y vivir en un ambiente más sano.
Esta iniciativa ha sido apoyada por el Gobierno Nacional a través del Instituto Nacional de Preinversión, institución adscrita a la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades), que financia los estudios por un monto aproximado a $ 3,5 millones. Con este apoyo financiero y la supervisión técnica del Ministerio del Ambiente, a través del Programa Nacional de Gestión Integral de Residuos Sólidos, las autoridades de los 20 municipios tendrán la información necesaria para gestionar adecuadamente sus residuos. Actualmente, estos 20 cantones generan más de 350 mil toneladas de residuos sólidos al año.
El Plan Nacional para el Buen Vivir 2013-2017 plantea 12 objetivos y la consecución de estos podría verse afectada positivamente si estas 20 autoridades hacen realidad el proyecto y no se queda solo en estudios. Más de un millón de habitantes de los cantones Baba, Babahoyo, Puebloviejo, Palenque, Quinsaloma, Urdaneta, Montalvo, Quevedo, Mocache, Vinces, Valencia, Buena Fe, Ventanas, Caluma, Echeandía, Las Naves, Palestina, Balzar, El Empalme y Jujan podrían mejorar su calidad de vida al aumentar la cobertura en recolección de basura y eliminar los botaderos a cielo abierto. El aumento en la cobertura de recolección, aseo de calles e implementación del o los rellenos sanitarios generaría empleo digno para la población de estos cantones, pero también lo haría en gran medida el aprovechamiento de los residuos.
Aquello, además, aportaría a una transformación en la matriz productiva y energética, puesto que la mayor parte de los residuos de estos cantones es orgánica, tiene un gran potencial de producción de energía y abono. Su aprovechamiento podría también crear nuevas industrias e investigación.
Ventajas de la mancomunidad
Además de estos beneficios que el proyecto puede otorgar a la ciudadanía, no se pueden omitir los inmensos aportes para las administraciones municipales. El hecho de mancomunarse genera lo que suele llamarse economías de escala, esto quiere decir aprovechar mejor los recursos y reducir los costos de manejo. Para poner un ejemplo, imagine que usted tiene que sacar muchas fotocopias, por lo que quiere comprar una fotocopiadora pequeña y contratar una persona para que las saque. Sin embargo, si tiene 20 amigos que necesitan sacar muchas copias y entre los 20 compran una fotocopiadora industrial y contratan a una persona que las saque, el costo de cada copia será menor. Es igual con el manejo de la basura, si cada municipio maneja sus desechos individualmente, invertiría más dinero, ya que debe comprar maquinaria, carros recolectores, etc. En el aprovechamiento de los residuos, la situación es similar debido a que no es viable y mucho menos rentable poner una planta para aprovechar los residuos con muy poca basura, pues igualmente hay que adquirir maquinaria y contratar mano de obra que transforme los residuos en algo útil, por lo que es mucho más beneficioso cuando se junta más materia prima -en este caso residuos sólidos- para transformarla.
Otro beneficio para los municipios es que con el aprovechamiento de los residuos disminuye la cantidad de basura que debe ir al relleno sanitario, lo que reduce los costos del manejo y aumenta su vida útil.
La suma de estos beneficios ha motivado a la unidad de estos 20 gobiernos locales y el Gobierno Nacional. En términos financieros, esta iniciativa sería tan rentable que incluso subsidiaría a otros servicios municipales, como agua potable y alcantarillado. Es lamentable que otros municipios más grandes, que por sí solos generan más basura que estos 20, no hayan adoptado ya un sistema integral de residuos sólidos que incluya su aprovechamiento.
Como todo proyecto gubernamental, la iniciativa necesita del empoderamiento ciudadano. Esto ayudará a su implementación desde su primera etapa y alentará la eliminación de los botaderos a cielo abierto, reducirá la cantidad de basura generada, reutilizando, participando activamente en la separación de la basura, respetando los horarios de recolección, etc.
Actualmente, la primera etapa de los estudios ya ha sido presentada a las autoridades locales. La parte más urgente es el cierre de botaderos y la construcción de celdas emergentes de manejo mancomunado donde disponer la basura temporalmente. La vida útil de estas celdas, que no son otra cosa que rellenos sanitarios temporales, es de 2 años. Con suerte, ese tiempo podría ser suficiente para que las autoridades locales logren, con el apoyo de todos los actores, tener listo el sistema de gestión y aprovechamiento de los residuos de estos 20 cantones.
Datos
El Plan Nacional de Gestión Integral de Residuos Sólidos pretende la eliminación de todos los botaderos del país hasta 2017 y la implementación de 80 rellenos sanitarios.
Actualmente, el 27% de los gobiernos autónomos descentralizados cuenta con procesos de separación en la fuente. En 2013 se reciclaron 987 mil toneladas de residuos sólidos urbanos.
Los estudios para el manejo de residuos que se realizarán en la Zona 5 costarán $ 3,5 millones, aproximadamente, y serán financiados por la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo.
Los cantones que forman parte de la Zona 5 son Baba, Babahoyo, Puebloviejo, Palenque, Buena Fe, Las Naves, Quinsaloma, Urdaneta, Montalvo, Quevedo, Mocache, Vinces, Valencia, Ventanas, Jujan, Caluma.
También se encuentran los cantones Echeandía, Palestina, Balzar y El Empalme. Allí residen más de un millón de personas y en esa zona del país se generan más de 350 mil toneladas de residuos sólidos al año.
La ubicación geográfica de la Zona 5 la hace propensa a inundaciones que dificultan el manejo de residuos sólidos y la limpieza de las ciudades. Eso tiene efectos directos en la salud de los ciudadanos.
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